viernes, 27 de noviembre de 2009

Portadas (that's what I want)


Hoy va de periodismo, de lo mediático, de equivocar el objetivo, de estar perdido, de buscar la portada por encima de todo y encontrarte con que la portada que consigues va en tu contra, en vez de cantarte alabanzas y loas...

Hace tiempo que el fútbol no está en el césped. Hace tiempo que dejó de ser no sólo deporte, sino espectáculo. El fútbol ya es sólo negocio. ¿Malo? No necesariamente, salvo siconfundimos el medio y lo tomamos por el fin.



El Berbabéu se llena en pleno julio para ver nuevos jugadores. Vuelve la ilusión... Pero se queda en eso. Hay más gente dispuesta a pasar calor y permanecer horas de pie por estar en el día de la noticia, ver a Cristiano o a Kaká... Verlos, sólo verlos. Vale, sí, y aplaudirlos. Pero esa ilusión desmedida antes de que ruede el balón, sólo se puede tornar en insatisfacción del público (aunque vayas líder) y eso te convierte en frágil... y en cuanto ganes tres partidos sólo por 1-0, el equipo metaboliza esa insatisfacción en ansiedad... y se cae todo el castillo de naipes.



Ese mismo verano, el Atleti no se decide a hacer algo que quizá necesitaba: vender a Forlán. Le llegaron a ofrecer 36 millones, su cláusula de rescisión. Firmada, por otra parte, en libertad. El uruguayo no puso una pistola en el pecho a nadie para que le pusiesen esa precio. Pero, madre mía, era el Madrid (el enemigo grande de la ciudad) el que cometía la sandez de ofrecer semejante pila de millones. ¡Y encima lo hacía con trampa! Se permitía incluir a Negredo en la operación... Negredo, un delantero de 24 años, además de 16 millones de euros, a cambio de otro de 31 años. Caray, no está mal, pero no se atrevieron, por lo que dijera la afición al calor de las portadas.

Hoy, el Madrid y el Atleti se arrastran sobre el campo. Uno anda fatal en la clasificación; el otro es líder pero insatisfecho. Ambos han equivocado el camino. Han temido a los medios, a la gente... No tienen un modelo basado en el juego que quieren hacer, sino en conseguir penetración en los medios. Se dejan dirigir desde fuera, desde las páginas de la prensa, los micros de la radio, las oantallas de la tele.




El Bernabéu se durmió contra el Zúrich. Infiernado por la falta de modelo del chilenoPellegriniAl que Valdano eligió porque daba el perfil... de guapo, elegante, serio y, sí, que venía de jugar bien con el Villarreal. Pero, ¿de jugar como quiere el Madrid? ¿como quiere la tradición blanca? ¿seguros de que era una buena elección? No lo parece, Valdano se pasa el día lamentando por las esquinas el mal juego y lo cerquita que estuvo de firmar a Wenger(otra vez) el pasado verano.

 

Los colchoneros ya ni lloraron el miércoles viendo a los suyos en Chipre. Renovaron a regañadientes (en verano) a Abel y, como no creían en él, el equipo lo notó, la zozobra se convirtió en marejada y luego llegó la tormenta. Como no saben qué quieren pero la prensa decía que Abel era un desastre, echaron al técnico, trajeron a otro, Quique, y a ver qué pasa... Lo que pasa es que todos se borran, esperan el final de campaña y, si bajan a segunda, pues mi finiquito que me voy...



La prensa tiene derecho y obligación de criticar, de opinar, de indicar lo que cree que está bien y lo que está mal. Pero los medios no mandan. Está bien tener más portadas del Marca que los demás, pero si sólo buscas la portada ("Aquí está FULANITO", "MENGANITO, bien vendido"...) te encuentras con que sólo tienes eso: portadas, cromos valiosos, pero nada de fútbol. Entonces, las portadas empiezan a criticarte, los estadios se acaban vaciando, la gente se cabrea y, como sólo buscabas que te quisiesen sin ofrecer fútbol a cambio, te quedas sin nadaLos clubes son como los coches. Si al volante fijas la mirada en la curva, la trazas bien; si la fijas en un bello paisaje, te estampas.



miércoles, 25 de noviembre de 2009

Reflexión rápida sobre Bussaca


Una cosa bien hizo el suizo Bussaca el martes en el Camp Nou.



Entraba como un búfalo Puyol al remate en una falta lateral botada por Alves y, en lugar de contactar con la pelota, remató sobre la cabeza del delantero del Inter Diego Milito. Éste quedó tendido en el suelo, dolorido, quizá conmocionado, casi inerme.



El balón había salido despedido hacia la banda izquierda del ataque barcelonista y los culés tenían intención de volver a colgar el esférico, de continuar la jugada...

Bussaca paró el juego. ¡Bien! Por fin un árbitro toma la decisión que le corresponde por reglamento y que llevan años obviando, quizá décadas, en cumplimineto cobarde de un artículo más del reglamento oculto de los colegiados: "En caso de duda, no te metas". PeroBussaca fue valiente, y se metió. Muy bien por el suizo.



El Camp Nou se le echó encima, los jugadores blaugranas se llevaban las manos a la cabeza... Pero la norma es clara. En caso de que haya peligro para la integridad física de un futbolista, el árbitro debe detener el juego para que éste se a atendido y retomarlo, posteriormente, mediante balón a tierra, lo que todos conocemos por bote neutral.



Pero Bussaca se equivocó en el 'posteriormente'. Muy mal por él. En cuanto paró el juego, el argentino Milito se sintió repentinamente bien, se levantó, hizo un gesto de disimulo, meneando la cabeza y resoplando (vaya, qué golpe) y se reintegró al juego; se puso a correr.Milagro, un segundo antes estaba poco menos que inconsciente. Entonces, el trencilla pidió el balón, llamó a un futbolista de cada equipo, soltó la pelotita al suelo y aquí no ha pasado nada.

Mal. Muy mal. Milito debió salir en camilla y ser atendido en la banda, como dice el reglamento. Luego, una vez recuperado, acercarse a la línea de medio campo y pedir su reingreso en el terreno de juego. Sólo entonces, Bussaca le debió permitir volver a jugar.



Pero el delantero ex del Zaragoza y del Génova ya había hecho parte de su trabajo. Evitar una situación de desventaja para su defensa en un ataque del Barça.

Con razón el Camp Nou se indignó y silbó a Milito. Y a Bussaca.

domingo, 22 de noviembre de 2009

Dando patadas al fútbol


Publicado en EL MUNDO el 22 de noviembre de 2009




Infografía de mis compañeros de EL MUNDO.

Hay que saber de fútbol para ser un buen árbitro. Haberlo jugado para anticiparse, para pensar pronto y entender al futbolista. Ésa es la mejor manera de no influir, de no ser protagonista, de no darle patadas a este juego y ser un juez justo.


Después de lo acontecido el miércoles en Saint Denis, queda claro que un tío con un silbato es capaz de estropear un partido y mucho más. Aparte de dudas sobre supuestas complicidades del colegiado –ojo a la operación judicial contra el amaño de partidos iniciada en Alemania esta semana–, la clave está en el propio fútbol.
Portugal gesticula en la banda del Bernabéu.
Portugal, en la banda del Bernabéu (21-11-2009)


El sábado en el Bernabéu, Ramírez Domínguez perjudicó a ambos equipos, así que su influencia en el resultado es difusa. El Racing reclamará con razón el gol deCanales (1), que rompe en posición legal entre los centrales madridistas. LaInternational Board –que reúne a FIFA y a las tres federaciones británicas,fundadoras del fútbol– matizó en 1995 la regla 11, aclarando que el fuera de juego posicional «no constituye en sí una infracción». Si Geijo, adelantado, no influye en la jugada, el linier debió guardarse la bandera. Pero la culpa es del árbitro por no entender una jugada mil veces vista.

El árbitro Ramírez Domínguez.

El gol daba el empate al Racing... pero el Madrid pondrá sobre la mesa el evidente penalti previo de Lacen a Benzema (3). No es igual anular el tanto deCanales con 1-0 que con 2-0 en el marcador. Si no ve claro el contacto, un buen árbitro debe saber leer la jugada: dónde va el balón, dónde el defensor, dónde el atacante. Era penalti claro.
[foto de la noticia]
Pablo arrolla a Lopo en el descuento del Deportivo-Atlético (21-11-2009).


Sí acertó Paradas Romero en La Coruña, al señalar pena máxima Pablo, que arrolló a Lopo (2). El trencilla había abonado la locura en 90 minutos desastrosos y el Atlético –ya desquiciado de antemano– se vio derrotado en el tiempo añadido, lo que le hará sentirse víctima. Pero fue un mal arbitraje para ambos equipos, que les impidió centrarse en el fútbol. Era penalti, pero Paradas no entendió nada en todo el partido.

Paradas Romero, trencilla del Deportivo-Atlético (21-11-2009).
  




periodistaycolegiado@elmundo.es

jueves, 19 de noviembre de 2009

El sueco que se hizo el ciego


Publicado en EL MUNDO el 19 de noviembre de 2009

[foto de la noticia]

El gol fue de Gallasla ilegalidad de Henryel culpable fue el árbitro, pero el responsable, en realidad, es otro. Francia, toda una campeona del mundo, llegará al Mundial con la camiseta sucia por culpa de un gol tramposo en una prórroga agónica y tras un partido lamentable. Eso es un hecho, pero la causa no hay que buscarla en la mano de Henry, sino en otra, la que mece la cuna del fútbol.

Cuando un árbitro es designado para la vuelta de una repesca mundialistasu nombramiento no se hace al azar. Es un partido de mucha presión, con dos países jugándose prestigio y millones de euros. Y la UEFA pensó que el sueco Martin Hansson era el más indicado para el trabajo.



Referee Martin Hansson waves away the appeal from Ireland's Shay Given after France's equaliser

Hansson ya lo conocemos. Fue el trencilla que inventó un penalti para el Liverpool el año pasado en Anfield. El Atlético ganaba 0-1 cuando Steven Gerrard ensayó el vuelo sin motor en el área colchonera. Nadie miró al árbitro porque nadie esperaba nada de esa jugada, pero él señaló la pena máxima, propició el gol de los reds y el Atlético –entonces enfangado conPlatini (presidente de la UEFA y francés) por la bronca de los hinchas del Marsella (franceses) en el Calderón–, fue perjudicado por un favor al poderoso.



Un auténtico árbitro UEFA, como Hansson, sabe lo que debe hacer. No es tan importante el reglamento como asegurarse el puesto complaciendo al que manda. Era muy difícil, para él y para el linier, ver la trampa del capitán francés, pero el sueco que ayer se hizo el ciego tenía un favor que devolver.



Fue él quien pitó la final de la Copa Confederaciones el pasado junio en Sudáfrica. Un regalazo de más de 10.000 euros sólo por ese partido (añádanse dietas de 15 días y el fijo estipulado). La FIFA no quería un mundial sin Francia. Y el sueco no tuvo ni que hacer lo de Anfield. Bastó con no ver las manos de Henry. Quizá por eso Platini es «reacio a la tecnología para ayudar al árbitro». Así es más fácil hacer cosas como la de ayer.

Trapattoni conversa con el cuarto árbitro durante el partido ante Francia

periodistaycolegiado@elmundo.es

jueves, 12 de noviembre de 2009

La Copa Chapuza

Lo de Sergio Ramos


Éste es un blog de periodismo y árbitros, pero para explicarme me he de meter un poco en el fútbol en sí... lo siento. Pronto incumplo las normas que yo mismo me impuse
Doble chapuza.
1ª Del club, cuya Dirección Deportiva no se enteró, no quiso enterarse, no está para esas cositas...

2ª Del Comité de Competición, que se fumó un día de trabajo, porque en Madrid (no en Las Rozas, donde se reúne) era fiesta.


El club, el Real Madrid, con un presupuesto anual de más 400 millones de euros (70.000 millones de pelas) no puede permitirse no saber, no acordarse o no lograr explicar coherentemente lo que pasó con la no convocatoria de Ramos para el duelo ante el Alcorcón. ¿Para qué está Pardeza? Se supone que para coordinar todo esto. Porque Valdano ya explicó el primer día en la web del Madrid que él no está para las cosas del día a día que su responsabilidad ya es otra mucho mayor, y tal y tal.
Así que queda Pardeza para la dirección deportiva, de hecho ése es su cargo: Director Deportivo. ¿Y qué hace? Fichar, no. Eso lo hace el presidente, con la pasta que le prestan y la que recauda. Marcar la política deportiva del curso, no. Eso lo hace Valdano, adjunto a la presidencia y director general. ¿Así que...? Pues eso. La Copa Chapuza.
El Comité de Competición, con Alfredo Flórez a la cabeza.
¿Cómo que se cogen fiesta? ¿Y si se la cogen los futbolistas cada domingo, día no laborable a todos los efectos? ¿Y si se la cogen los futbolistas cuando no pueden librar ni un día en semana cuando se encadenan partidos miércoles, domingo, miércoles? No, señores. Ustedes trabajan para un producto que no para. No se pueden montar un puentecito un lunes porque sea la Almudena, porque la Almudena lo es en Madrid. Y las sanciones lo son en toda España. Claro, que si los clubes les permiten este mamoneo...
Otro ejemplo de cómo funciona este fútbol hiperprofesionalizado en España. Y aún nos preguntamos por qué la Liga inglesa nos da sopas con ondas...